Por el Dr. Héctor Ulises Napolitano
Según el diccionario, comprender es sinónimo de incluir, contener, abarcar, penetrar. También equivale a entender, aunque hay quienes los diferencian al decir a veces “lo entiendo, pero no lo comprendo”. Es decir, sé de qué se trata, pero no estoy en condiciones de dar un juicio sobre el tema o cuestión que se plantea. Por ejemplo, entiendo tu problema, pero quien lo va a comprender y resolver es un profesional.
En mi opinión, el entender es la fase primaria del comprender. En el primero se toma conocimiento, en el segundo se razona e interpreta. De allí que comprender tenga como sinónimo a la palabra penetrar, que significa introducirse en algo profundizándolo (compenetrarse, ahondar).
En tal sentido, es común decir “leí, lo entendí, pero me falta comprenderlo”.
El entender está más relacionado con la noción, en cambio el comprender con el análisis, la evaluación y la conclusión a que se llega.
Por lo tanto, el entender algo a medias no cabe en el comprender, que tiene como otro sinónimo el de abarcar. Por ejemplo, el llegar a comprender una ciencia puede derivar en la comprensión de otras disciplinas.
El incluir y el contener como características de la comprensión juegan un papel importantísimo en las actitudes y relaciones humanas.
Como actitud es contemporizadora y tolerante, por lo que se califica a la persona que la tiene de comprensiva. También contenedora, respecto de alguien que necesita ser protegido o estimulado.
El ser comprensivo es una virtud que puede dar lugar a otras, como la empatía y la solidaridad.
La empatía es su máxima expresión, pues consiste en comprender a otro colocándose en su misma situación.
Es una palabra muy de moda, pero poco practicada, porque lo común es el ¡te entiendo, pero no puedo hacer nada!.
El ¡no te comprendo! más que una incomprensión es una evasiva de quien quiere desatenderse y no comprometerse. Distinto de la contestación para que otro repita o aclare lo que dijo.
A veces, comprender implica justificar actos o sentimientos. Por ejemplo: ¡comprendo por qué lo hizo!, ¡tiene razones para sentirse así!.
Respecto a la imputabilidad penal de una persona por un delito que cometió, juega un papel decisivo, pues para ser penalmente imputable es condición esencial comprender la criminalidad del acto que se ejecuta.
En tal aspecto, la comprensión determina el límite entre el ser consciente y el inconsciente y alienado.
En cuanto a lo intelectual tiene un rol preponderante en la asignatura denominada “comprensión lectora o de textos”, que tantos dolores de cabeza da a los estudiantes que la tienen y deben rendirla en el curso de ingreso a la facultad.
Los que utilizan para estudiar la memoria y no el razonamiento, no llegan a comprender lo que estudian, porque luego se olvidan. Por el contrario, quien lo ha comprendido fija el conocimiento adquirido, que le servirá a su vez para el abordaje de otros temas o materias. De allí que la comprensión incluye, contiene y es abarcadora.
El comprender es la base fundamental en la interpretación de leyes, decretos y reglamentos, y en la administración de justicia al momento de juzgar y dictar sentencias.
Querer comprender el mundo que vivimos, no solo debe ser inquietud de los filósofos, sino también de cada uno de nosotros, pues quien a su modo lo llega a comprender sabe siempre a qué atenerse y cómo defenderse.
“El comprender eleva al sabio; perturba al eterno incomprendido; es un verbo que no conjuga el ignorante ni el obstinado; y resulta una pesadilla para el distraído”.