En las últimas horas se produjo un voraz incendio que dejó el saldo de daños materiales totales en una vivienda ubicada en calle Capiel al 300.
Según el testimonio de los testigos las llamas se expandieron casi de inmediato por todo el lugar.
Los primeros en ingresar fueron dos vecinas y un vecino «Teníamos miedo que esté el nene adentro», expresaron. Para entrar tuvieron que romper ventanas y tener mucho cuidado ante un posible derrumbe.
Afortunadamente, ni el menor ni su madre estaban en el domicilio.
Quienes ingresaron pudieron sacar algunas de las pertenencias, inclusive una garrafa para evitar mayores daños.
De inmediato llegaron al lugar tres dotaciones de Bomberos, personal policial, Guardia Urbana y Defensa Civil.