Tras el grave accidente que sufrió el policía dolorense Luciano Finolleti, fue atendido en la Clínica de Saladillo, donde recibió la atención necesaria y adecuada, pero debió ser trasladado a un Centro de Mayor Complejidad debido a la gravedad de las fracturas que presentaba.
De inmediato, se gestionó el traslado a la Clínica de la Comunidad de Ensenada, para recibir la atención especializada y poder ser intervenido quirúrgicamente.
Lamentablemente, nada de eso ocurrió y tanto el paciente como su familia vivieron un calvario. «Desde el lunes 2/6 a las 21.30hs, hasta el miércoles 4/6 a las 10.30 que estuvo internado en dicha Clínica no se le hizo ningún estudio propio de la lesión, no se le limpió la herida, ni se acercó ningún traumatólogo a él o la familia a dar un parte», indicaron los familiares a Noticiero Diario.
A esto se suma las malas condiciones de higiene y el destrato que sufrieron. Todo en un contexto de preocupación por la evolución de la salud de Luciano, que requería una operación urgente.
Finalmente, gracias a la insistencia y reiteradas gestiones realizadas por la familia y la ART, ante el desamparo y falta de atención médica, lograron el traslado al Centro Integral Fitz Roy de Capital Federal.
«Acá la situación es totalmente distinta, con Profesionales a la altura de las circunstancias y especialmente humanos», indicaron familiares a Noticiero Diario.
Ya en la clínica Fitz Roy le realizaron una batería de estudio y detectaron otra lesión, que demandó un tratamiento especial y la postergación de la operación para esta semana.
«Es importante saber cómo es la atención en la clínica Comunidad de Ensenada, no hay atención profesional, sólo abandono de los pacientes e interés por la facturación», señalaron del entorno del joven.
Hay que agregar que la Clínica de la Comunidad tiene ya varias denuncias vinculadas a la mala atención médica y profesional y fue uno de los centros médicos allanandos en el marco de la investigación de la Justicia Federal por las millonarias estafas al PAMI La Plata con falsas prácticas médicas e internaciones.
Recordemos que el grave accidente se produjo a la altura del kilómetro 310 de la ruta 51, en jurisdicción General Alvear. Se trató de una colisión por alcance entre un VW. Voyage color blanco y una moto policial en la que circulaba el dolorense, efectivo del Departamento Central Motorizada Vial, quien se encontraba cumpliendo servicio.