Dos efectivos policiales asistieron y trasladaron a un bebe que estaba ahogado y ya casi no respiraba.
Se trata de Kevin Echarren y Carlos Pueblas quienes estaban realizando un recorrido de prevención y escucharon los gritos desesperados de la mamá y el papá de Martincito, un bebe de un año que estaba ahogado y no podía respirar.
Sin dudarlo actuaron con rapidez, compromiso y profesionalismo, realizando tareas de reanimación y trasladándolo al Hospital San Roque, dónde fue rápidamente atendido
«Queremos agradecer en nombre de toda la familia a los efectivos por su labor humano y actuar con vocación al prójimo, como así también, a Atilio Sachella y todo el equipo del Hospital Municipal», señaló Martín Pablo Marcelo Suárez en sus redes sociales; informó Noticiero Diario.