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Etchevarren se adjudicó como gestión personal una obra de ABSA que en realidad corresponde a un Amparo Judicial

Federico Sabalette
Federico Sabalette
5 Minutos de lectura

Que el Intendente Etchevarren vive en permanente especulación electoral no es nuevo, lo reconoce su propio entorno, también muchos dolorenses informados de la realidad de los hechos, pero quizás muy pocas veces como ahora sucedió su falacia quedó rápidamente expuesta en un Expediente judicial y que lo expone claramente al ridículo.

El jueves pasado Camilo Etchevarren se adjudicó como propia de su gestión personal una obra que realizará la Empresa ABSA en nuestra ciudad, señalando el parte de prensa distribuido por la Municipalidad, que por “gestión del Intendente Etchevarren se cambiarán 20 mil metros en la red domiciliaria de agua”, diciendo puntualmente el Jefe Comunal: “hemos conseguido que se recambien las cañerías de la red distribuidora de agua en nuestra ciudad”, adjudicándole a su Secretario de Obras Públicas la autoría del proyecto.

A las pocas horas la falacia quedó al descubierto, al conocerse que la obra que Etchevarren se adjudicaba como de su propia gestión propia y correspondiente a un proyecto municipal, en realidad era la respuesta de ABSA en un Expediente judicial, un Amparo Colectivo que por deficiencias en el servicio promovió el Dr. Germán Pereyra en nombre de 180 vecinos de la ciudad y que tramita en el Juzgado Civil y Comercial nº 2 de Dolores.

Al respecto debemos recordar, que la titular del Juzgado acogió la presentación realizada por el abogado dolorense, disponiendo que para garantizar el servicio de agua corriente en nuestra ciudad “la Provincia de Buenos Aires y ABSA presenten en un plazo no superior a los 180 días un Plan integral de Obras y Gestión conforme Decreto 878/03 y que contemple: a) Estudio, Proyecto y Construcción de la Infraestructura adecuada. b) Gestión adecuada del Servicio para lo cual se deberá contar con un presupuesto acorde a fin de garantizar el funcionamiento constante y continuo de las Obras Planificadas”.

Que dicha resolución había sido apelada por la Empresa ante la Suprema Corte de Justicia de la Provincia, y que este alto tribunal en agosto de 2020 había confirmado la sentencia, quedando de esa forma firme el Amparo Colectivo resuelto en el Juzgado Civil 2 Departamental.

La presentación de la Empresa en que Etchevarren basó su falacia

El Intendente Etchevarren aprovechando que ABSA no ha publicado aún el plan de obras para Dolores en medios de prensa locales, como la justicia oportunamente lo dispuso, utilizó el informe presentado en el Expediente por el abogado de la Empresa elaborado por las Gerencias de Ingeniería y Planificación y la de Operaciones, para adjudicarse como de su iniciativa las obras en ejecución o que se encuentran programadas, como lo es el reemplazo de cañerías.

Y la falsedad de su anuncio se lo puede advertir claramente, cuando Etchevarren por ejemplo señala según lo difundido por el Municipio, haber dicho -en cifras redondeadas-, “se van a remplazar 19.235 metros asbesto cemento por caños PEAD, en diámetros que van de 75 a 250 milímetros. Es una inversión de alrededor de 540 millones de pesos”, ya que ello es lo que puntualmente se condice con la presentación de ABSA ante el Juzgado, donde se indica que han “presentado ante la Dirección Provincial de Agua y Cloacas de la Pcia. de Bs. As. (DiPAC) el proyecto de obra de recambio de las redes de distribución de agua” para Dolores, y que ello consiste en el reemplazo “de aproximadamente 18.260 m, de red de agua está dividido en tres Etapas: Etapa I de 7.660 m. en diámetros comprendidos entre DN 75mm, DN 110mm, DN 160mm, DN 200mm; Etapa II de 7.790 m. en diámetros comprendidos entre DN 75mm, DN 110mm, DN 160mm, DN 200mm, DN 250mm; Etapa III de 2.810 m, en diámetros comprendidos entre DN 75mm, DN 110mm, DN 200mm”, y donde además se precisa que “la obra tramita a través del EX-2022-10231811-GDEBA-DPTLMIYSPGP y registrada como Licitación Pública 67/2022, con un presupuesto de $. 529.733.561, siendo el plazo de obra de 540 días”.

Como corolario podría decirse, que seguramente el Intendente pudo imaginar que el anuncio lo expondría en cierta manera al ridículo y que él lo haría con su Secretario de Obras Públicas, ya que al ser el servicio de agua corriente un tema prioritario para los vecinos, lo volcado en un expediente judicial tarde o temprano saldría a la luz.

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