El Gobierno de Alberto Fernández confirmó un asueto para los días 23 y 30 de diciembre que está dirigido a todos los trabajadores de la administración pública nacional.
La medida fue tomada «a fin de facilitar las clásicas reuniones familiares que se realizan en Navidad y Año Nuevo, se estima procedente posibilidad el acercamiento de quienes, por diversas causas, se domicilian lejos de sus seres queridos».
En el ministerio del Interior de la Nación, a cargo de Eduardo De Pedro, se aclaró que la medida de asueto «no alcanza a las instituciones bancarias y entidades financieras». Por lo tanto, la atención en los bancos será normal.
La resolución ya fue oficializada con su publicación correspondiente y lleva la firma del funcionario José Lepere, quien está al frente de la Secretaría del Interior.