En el marco de un juicio abreviado realizado en el Tribunal en lo Criminal 2 Departamental. El hecho fue perpetrado en mayo de 2021 por dos sujetos armados, quienes se hicieron luego de atar a las víctimas, con una importante suma de dinero como botín.
En Juez Dr. Eduardo Campos Campos actuando como Juez unipersonal del Tribunal en lo Criminal nº 2 Departamental, condenó a un individuo hallado responsable del robo perpetrado en una casa martillera de nuestra ciudad, hecho sucedido en mayo de 2021.
El juicio tuvo características de abreviado, habiendo sido consensuado por las partes técnicas con acuerdo expreso del imputado en cuanto a la calificación y el estimado de la pena a imponer.
El Dr. Campos Campos sobre el hecho señaló en el veredicto, que en las primeras horas de la noche del 19 de mayo de 2021, dos sujetos portando arma de fuego ingresaron a las oficinas de calle Belgrano de una casa martillera de nuestra ciudad dedicada a la venta de hacienda, donde previo maniatar con precintos al propietario y al contador se apoderaron de una importante suma de dinero y un celular IPhone.
Al efectuar la denuncia el damnificado refirió, que habían golpeado la puerta del local, que estaba cerrada con llave, y que al haber ido a ver quién llamaba había mencionado el nombre de un cliente y dicho que tenía animales para vender, razón por la cual le había franqueado el ingreso, avalándose en esas circunstancias éste sobre él y otro sujeto que lo acompañaba sobre el contador, que los habían tirado al piso amenazándolos con disparar el arma que portaban, que a ambos los habían atado de manos y pies con precintos y colocado juntos boca abajo. Que luego uno de los delincuentes había tomado el dinero que había en la caja, la cual en ese momento estaba abierta.
El contador de la empresa ratificó esos dichos, brindaron ambos a la policía una descripción física y de vestimentas de los dos individuos que habían perpetrado el robo.
Personal policial abocado a la investigación pudo observar en cámaras de seguridad de vecinos de la zona la circulación en ese horario, de dos personas en una moto de alta cilindrada a gran velocidad. Asimismo se logró determinar, que una mujer había comprado 4 precintos gruesos y largos en una Ferretería un día antes del robo, aportando el dueño de ese local filmaciones de su cámara de seguridad, señalando, que le había llamado la atención la insistencia de la mujer en cuanto al precinto de mayor tamaño y longitud.
Los investigadores según surge del fallo, a partir de la descripción de una de las víctimas y el modus operandi de los delincuentes, pudieron determinar que no sería ajeno al hecho Troncoso Albornoz, un individuo sindicado en otros delitos y que estaría en rebeldía ante la justicia. Se identificó quién sería su pareja, donde residían, y posteriormente se relacionó a la mujer con la que había comprado los precintos.
Tras ello se pudo establecer que Troncoso luego de la fecha del robo había adquirido una moto Yamaha de gran valor comercial, que también que había realizado compras de indumentaria deportiva, pedido presupuestos de materiales de construcción, había realizado junto con su pareja compras en efectivo, siendo que no tenía trabajo estable ni había realizado trabajos de changas.
En la rueda de reconocimiento el sindicado Troncoso fue reconocido por una de las víctimas, como también la boina incautada en su domicilio y que llevaba puesta al perpetrarse el delito.
El imputado al declarar intentó deslindar su responsabilidad diciendo que la boina y los precintos secuestrados en su domicilio habían sido puestos por la policía, también intentó justificar la compra de la moto y otros gastos realizados, diciendo que habían sido solventados con producto de sus ahorros y de una venta de una moto anterior.
Al respecto el Magistrado señaló, que era evidente que con sus dichos el procesado intentaba mejorar su situación procesal frente al hecho que se le imputaba, pero que el plexo probatorio analizado desmoronaba totalmente su coartada.
Por ello el Dr. Campos Campos resolvió condenar a Adriel Rodrigo Troncoso, de 31 años de edad, natural de la Capital Federal y con domicilio en Dolores, como autor del delito de” Robo agravado por el uso de arma de fuego cuya aptitud para el disparo no ha podido ser acreditada”, imponiéndole la pena de “Tres años y tres meses de prisión”.