Presidente de la Casa del Chaco en la provincia de Buenos Aires:
Hace unos días, Pablo Meza, presidente de la casa del Chaco en la provincia de Buenos Aires, vino a Dolores a manifestar su apoyo personal y también de la Institución que preside a los padres de Fernando Báez Sosa, en medio de las jornadas del juicio oral que se desarrolla en los Tribunales de esta ciudad.
Hablamos con él para conocer sus motivaciones, y también el significado del gesto de entregarles una imagen de la Virgen de Lujan.
- – ¿Con quiénes se reunió?
Estuve con Fernando Burlando y con los papás de Fernando Báez Sosa. Vine a apoyar a los padres de Fernando pidiendo justicia acá en Dolores. Soy un hombre muy católico, muy creyente, y tengo unas imágenes que les entregué a los padres de Fernando y otra al Dr. Burlando. Es una imagen en relieve de la Virgen de Lujan. Vine a brindar solidaridad en nombre de todos los residentes chaqueños en la provincia de Buenos Aires, que somos muchísimos, 500 mil. Somos una comunidad de residentes importante. En La Plata, Berisso y Ensenada residen 36 mil chaqueños, como es mi caso. Nosotros somos migrantes de nuestra propia provincia, y vinimos a Buenos Aires.
- – ¿Cómo se vive este caso?
Es una terrible circunstancia de la vida, y como también soy padre, no encuentro explicación para un dolor tan grande. Repudio totalmente lo que han hecho estos asesinos, y me pregunto por los valores y la ética que han recibido de la crianza de sus padres, qué les han enseñado. Si a tus hijos le enseñas y les inculcas el bien, van a salir gentes de bien.
- – ¿Es, como el papá de Fernando, de origen paraguayo?
Soy hijo de paraguayos nacido en el Chaco. Por la situación económica, como todos los residentes que vivimos en la gran provincia de Buenos Aires, he venido a estudiar, como lo han hecho también muchos extranjeros, hermanos de Paraguay, Bolivia, Perú, Uruguay, etc. Y esta provincia me dio la posibilidad de estudiar y ser un hombre de bien. Voy a cumplir 60 años y tengo la suerte de conocer la mitad de la Republica de Paraguay, y tengo muchos amigos allá; son 3 millones en esta provincia, y en toda la Argentina más todavía; casi un cuarto de la totalidad de los que viven en Paraguay.
- – ¿Cómo logra contactarlos?
Tengo muy buenas relaciones con la embajada, con el consulado en La Plata. A través de ellos me contacté y comuniqué con la familia de Fernando Báez Sosa. Me pone contento la solidaridad de la gente en general, de la prensa, hoy todo el país está en Dolores, porque esto trascendió las fronteras. Latinoamérica está viendo este caso relevante, triste – lo digo como padre -. No puedo imaginarme lo que sienten los padres de Fernando, el dolor que sienten. Por eso les he traído la imagen de la Virgen de Lujan.
- – ¿La imagen de la Virgen es apoyo espiritual a pesar del dolor?
Exactamente, uno viene humildemente tratando de brindar una contención afectiva. Esto acá se hizo colectivo, todo el país está pidiendo que se haga justicia por Fernando. Me cuesta mucho explicarme esto, no estoy en la piel de esta familia para poder comprender realmente el sufrimiento que deben tener. Entonces, vine a darles un abrazo. Y la verdad, nos dimos un abrazo muy fuerte, se nos han caído lágrimas. Es una familia muy humilde, muy católica, por eso la imagen de la virgencita que les traje, que esta bendecida por Juan Pablo II; solamente hay 2500 de estas imágenes en el país, llego directamente desde Roma a la provincia de Buenos Aires.