Después de la polémica generada, el gobierno bonaerense postergó la actualización del régimen académico en la secundaria que establecía el final de la repitencia. Ya el Director General de Cultura y Educación, Alberto Sileoni, había aclarado que, de igual modo, la reforma no se vería reflejada en el ciclo lectivo que comienza el 1° de marzo, aunque esa era la idea original.
Ayer el Consejo General de Educación (CGE), que cuenta con mayoría del oficialismo, iba a darle el visto bueno a la actualización del régimen académico de la secundaria. El documento plantea un cambio profundo en el modo en que los estudiantes pasan de año, incluso adeudando muchas materias -que ahora son denominados “agrupamientos”- y fomenta espacios de refuerzo de aprendizajes para aquellos alumnos más apremiados.
Sin embargo, a raíz de la repercusión que generó la reforma, el proyecto quedó fuera del temario de la primera sesión del año del CGE y aún no se sabe cuándo se tratará.
“A la educación secundaria hay que modificarla, pero no pensamos hacerlo a las trompadas y sin consensos. Hay que modificar el régimen académico, las asistencia, la evaluación, la repitencia, los planes de estudios, los contenidos de las materias”, señaló Sileoni en diálogo con la AM 750.
“Se anunció algo que no va a ocurrir este año. Vamos a modificar algunas cuestiones, pero no esas cosas. Eso nos va a llevar más tiempo y vamos a trabajar en consenso con los directivos de las escuelas. Queremos una secundaria con más aprendizaje. No es más facilismo. Ningún piba va a salir de la secundaria sin aprender todas las materias, pensamos una asistencia más rigurosa”, advirtió el ministro de Educación bonaerense.
Entre los especialistas hay cierto consenso en que la repitencia no redunda en mejores aprendizajes y que incluso contribuye a que los chicos abandonen la escuela. Sin embargo, modificar solo ese dispositivo no alcanza y puede llevar a simplemente bajar la exigencia sobre los contenidos a incorporar.