La nueva gestión de gobierno municipal que encabeza el Dr. Juan Pablo García se encontró el primer día con un panorama casi desolador, más que complicado de lo esperado en cuanto a la Administración en general, como consecuencia del “desorden organizado” que dejó el ex Intendente Camilo Etchevarren y que obliga a que se realice una revisión total de nombramientos, contratos, gastos, licitaciones y obras ejecutadas.
Esta verdadera “pasada en limpio” sobre la gestión fenecida, a todas vista no resultará fácil pero tampoco imposible, a partir de hechos que por ahora han sido tildados de irregularidades manifiestas, pero que los actuales funcionarios no dudan en decir que podrían constituir delitos.
También desde la nueva gestión se anticipó que la Universidad de Buenos Aires (UBA) realizará una Auditoría de la Gestión de gobierno Etchevarren, en procura de dejar en claro el oscurantismo que la caracterizó y cuyas consecuencias comienzan a emerger.
Una de las situaciones irregulares y por demás llamativa, se detectó puntualmente en una computadora de la Asesoría Legal, la que presumiblemente contenía información sensible y que extrañamente apareció con su disco formateado y fuera de uso, lo que seguramente obligará a que se deba rastrea Expediente por Expediente para conocer qué se hizo o resolvió en cada caso en que esa área intervino.
Sobre esto supimos que se encuentra trabajando un Perito Informático especializado procurando restaurar la información borrada, y que existiría probabilidades ciertas de que se logre.
Conocimos también, que en una primera revisión efectuada por los nuevos funcionarios del área legales se detectaron irregularidades en Expedientes relacionados con compras y que estaban listos para su pago, puntualmente de uno, en el que las ofertas de los proveedores convocados (¿convocados?) por Etchevarren a ofertar en la “Licitación Privada” Etchevarren, no tenían sus firmas, que había doble dictámenes aconsejando la aprobación de la compra –por 12 millones de pesos- y con un papel no oficial aconsejando cuál de ellos utilizar.
Y que a consecuencia de esta irregular situación y por la responsabilidad que implicaba a las nuevas autoridades pagar erogaciones de la anterior administración, se decidió puntualmente no hacerlo pese a que ya estaba en Tesorería para ello, trabajándose hasta donde supimos en un Decreto para bloquear todos los pagos pendientes hasta la verificación fehaciente del estado y alcance de cada una de las actuaciones.
Aquella fuente mencionada nos decía: “los Expedientes fueron hechos para justificar gastos, no sabemos si las compras se realizaron”, aclarando ante nuestra consulta, “en estos casos han intervenido claramente funcionarios políticos, el personal municipal hizo solo lo que le ordenaron”.
Por otra parte, pudimos tomar conocimiento de Decretos firmados por Etchevarren en 2022 y en este 2023, donde mezclados con vecinos que realmente tenían necesidades de manutención de sus familias se pagaron trabajos realizados para el Carnaval del Sol o Fiesta de la Guitarra.
Estos Decretos -los que hasta ahora hemos individualizado-, los números 133, 143, 413 y 623 de 2022 y el 432 de 2023 fueron dictados bajo la argumentación que, “según encuesta, los solicitantes tienen graves problemas socio económico, que impiden solventar gastos emergentes para la manutención de sus familias, como así también otras necesidades que se detallan en las presentes actuaciones”, sin embargo, entre vecinos con necesidades constatadas se incluyeron a personas a las que se le pagó por trabajos en ornamentación de carrozas o tareas de maquillaje.
Por su parte hay un Decreto, el 509 de este año, donde para sustento de su familia se le otorgó 100 mil pesos a un vecino, llamativo porque trabaja en tareas de comercio exterior y aduana y hace inexplicable que se lo haya asimilado a quienes realmente tenían necesidades insatisfechas.