Ayer, en la intersección de calle Lara y Pichincha se produjo un accidente que involucró a dos camionetas: una Peugeot Partner y una Chevrolet.
El choque no dejó heridos, pero generó una gran impresión debido a un líquido derramado, que parecía ser sangre pero que en realidad sería refrigerante.
Durante la inspección posterior al accidente, se constató que la camioneta Chevrolet no contaba con la documentación requerida en el momento, por lo que fue secuestrada.
Afortunadamente, el incidente no resultó en lesiones para los ocupantes de los vehículos.