Una delegación de la Secretaría de Cultura de Dolores estuvo presente. El homenaje se realizó jueves y viernes, con charlas, recitales de guitarra y presentación de un libro sobre el artista a cargo de la Prof. Silvia Castro, impulsora de este homenaje.
El jueves 15 y el viernes 16 de agosto, una semana después de cumplirse el Aniversario de fallecimiento del músico y compositor dolorense, el Conservatorio de Música Luis Gianneo le rindió homenaje, “con el propósito de revalorizar el legado musical y pedagógico del guitarrista y compositor dolorense”.
El tributo comenzó el jueves a las 16.30 en la sede central del Conservatorio (Libertad 6066) con una charla sobre música argentina a del profesor Eduardo Isaac, y continuó, a partir de las 19, en la sala Nachman del Teatro Auditorium, con recital del Ensamble de Guitarras del Conservatorio a cargo del Profesor Carlos Villalba y estudiantes de la cátedra.
El viernes en la misma sede Central se hicieron presentes el Director de Cultura de Dolores, Sebastián Cretón, y los coordinadores: del Área de Música, María Gabriela Siccardi, y el del Proyecto Musical, Jorge Falcón.
La estudiante de guitarra Martina Casazza interpretó una obra de Heitor Villa-Lobos y luego se sumó al conjunto de guitarras dirigido por el Prof. Villalba, que deleitaron al público con “Invierno porteño” de Astor Piazzola, “Pecado de Juventud” de Raúl Carnota y “Tonada”, de Abel Fleury. A continuación la docente Silvia Castro presentó su libro dedicado a la vida y obra de Abel Fleury, invitando a Gabriela Siccardi, quien agradeció el tributo al artista dolorense.
El ciclo terminó en la sala Nachman con la actuación desde las 19:30 del Profesor Pablo Riderelli, presentando su nuevo disco que abarca el repertorio Argentino incluyendo obras de Abel Fleury.
El mismo viernes, antes del inicio de actividades, se llevó a cabo una acción muy significativa. Una de las salas de la sede Libertad del Conservatorio fue bautizada con el nombre de Abel Fleury, colocándose la placa indicativa y un gran cuadro con el retrato del compositor donado por su familia.
Este tributo es prueba de la infinita capacidad de la música para hermanar a los pueblos y a su gente. Para unirlos en una identidad bonaerense que sigue revelándose y construyéndose a través de la cultura.
- Las fotografías son de Alberto Chust, un dolorense radicado en Mar del Plata que suma siempre para mantener vigentes os lazos entre ambas localidades.