En las últimas horas, personal de la Policía Local clausuró un comercio dedicado a la compra y venta de metales por no tener habilitación ni libros de registros.
Además, por orden del Juzgado Correccional N° 2 se secuestraron 57 kilogramos de cobre y 5 bochas de heladeras.
El procedimiento se realizó en el negocio de calle Lincoln que no posee nombre comercial.