La indignación popular al conocerse el aumento en la dieta de los senadores se multiplica al comparar sus números con los sectores más vulnerables. Esto queda en evidencia tan solo con observar lo que gana jubilado, quien necesita dos años y medio de haberes para cobrar lo mismo que recibe un legislador de la Cámara Alta en un mes.
Sí, con los haberes mínimos, un jubilado recibe casi 30 veces menos de lo que pasará a ganar un senador y aún así hay varios de los que alzaron la mano que no se arrepienten.
Vale recordar que en una fugaz votación, tomaron la decisión de aumentarse los salarios en un 170%, el cual pasó de ser de 1,9 millones a más de 7 millones de pesos bruto. Abajo, muy por debajo, los jubilados que perciben la mínima apenas cobran $ 241.000.