La artista y cantante platense en dialogo con Compromiso repasa su vida, que también es su carrera y su camino en la música. Hoy cierra esta Peña que llega desde el Instituto Cultural de la provincia y que comienza a las 19 hs. con presencia de ballets y artistas locales. La entrada es libre y gratuita.
“Aún estoy andando y seguiré andando. Me parece la mejor manera de comenzar. Es un momento difícil de nuestra cultura, difícil transitar, los espacios, los recursos. Pero hoy van a encontrar algo transparente como esto.”
¿Cuáles son tus primeros recuerdos musicales?
Son muy claros. Con todo lo que había en casa trataba de hacer música, y todo lo que tenía un poco de relieve era un escenario (risas). Tengo recuerdos muy graciosos, creyendo un día que podía ser Madonna y esas cantantes que por los años 80’ eran tan mágicas y populares. En especial recuerdo tener 3 o 4 años, estábamos viviendo con la familia en Colombia, por la profesión de mi Papá (N.d.R. su padre es el inolvidable futbolista campeón en México 86’, el Tata Brown), y estar en mi primer escenario cantando, en el Jardín de Infantes donde iba con la bandera de Colombia atrás. Hay foto de ese momento.
¿A qué edad definiste tu carrera y cómo empezó el camino?
Para mí decidir la carrera en sí misma es todo el camino por transitar, así que todavía sigo definiendo mi carrera. De chica viajamos mucho con la familia, hasta que tenía unos 10 u 11 años, fuimos y vinimos mucho. Una vez que estuve en Argentina comencé a presentarme en certámenes, en eventos culturales, en espacios públicos, bares, Centros Culturales, lugares de encuentro, de música. Tenía a mis dos abuelos deliberando, uno decía que tenía que cantar tanto, el otro que tenía que cantar folklore. Les hice caso un poquito a los dos, y fueron transitando mis diez años de mis inicios, donde pasaron muchísimas cosas. El Tango me dio mucho, el Folklore me dio mucho.
¿Hubo un año de inflexión?
Luego en 1999 hubo como una catarsis. Tenía claro lo que quería ser y hacer, comencé con los estudios de música; quería estudiar canto, teatro, arte, danza, saber y hacer todo. Me pareció que estudiar Comedia Musical era apropiado, así que comencé ese año en el Instituto de Comedia Musical Argentino y eso me abrió otras puertas que decantaron en muchos tipos de espectáculos y crisis. Al poder hacer mucho a la vez se pierde lo poco, y aparece lo de “definir”. Pero después de un largo trayecto y de muchas cosas hermosas vividas con la música, hace dos o tres años que definí que quiero transitar de acá en más el camino de nuestra música popular, de nuestro folklore. Por esto estoy acá hoy, convocada por el Instituto Cultural de la Provincia, para traer el espectáculo folklórico “Andando”.
¿Qué referentes y referencias te guiaron?
Es muchísimo porque al haber incursionado en tantos ámbitos de espectáculo y musicales, eso te enriquece. En lo vocal siempre mi referente número 1 fue la señora Celine Dion, es alguien que admiro profundamente. He escuchado mucho ese estilo musical, he estudiado técnicas vocales como el belting, la técnica Alexander, y ella, Whitney Houston, esa camada de artistas extranjeras, fueron referentes. Comencé buscando sonidos como los de ella hasta que me di cuenta que eso no estaba muy bueno, que era mejor tener una guía directa, algún maestro o maestra que pudieran orientarme. En nuestra música siempre escuché a la “Negra” Sosa, lo mismo para seleccionar repertorio. Julia Zenko, Nacha Guevara, son muchas. También “Pepe” Cibrián con quien tuve el gusto de estudiar y trabajar, que me seleccionó para su elenco en una temporada. Esa es la parte positiva de abrirse y caminar largo y tendido, te permite enriquecerte.
¿Qué diría que se requiere para utilizar la voz como instrumento y transmitir cosas?
Es fundamental estudiar, yo lo hice desde siempre. Por muchas razones. Al ser docente y coach vocal, en este camino he acompañado a más de 300 voces. Hay que estudiar primero por una cuestión de salud vocal. Uno al tener referentes, busca parecerse a ese artista que admiras, dentro de lo posible. Ahí comienza a aparecer esa mezcla y podemos llegar a producir incomodidades, sensaciones extrañas o feas, y hasta llegar a dañarnos la voz. Por eso es fundamental estudiar, tener siempre la guía de un maestro, una maestra. Y por una cuestión acústica, cuando uno más conocimiento de la voz tenga, más resultados sonoros aparecen. Con técnica se logran diferentes maneras de interpretar, de cantar algo.
¿Es también algo que se siente al interpretar’
En mi caso lo vivo como cantante, como artista. Tener estudios vocales me permite una libertad increíble al momento de transmitir, de conectar, de buscar distintas maneras de encarar una obra, nunca sentirla de la misma manera para que se renueve con el público el impacto. Uno transmite sus vivencias como intérprete, interpretar tiene que ver con nuestro lenguaje. Como nacimos, como caminamos a lo largo de la vida, hasta donde llegamos. Todo nuestro entorno, nuestras costumbres, nuestro lugar, recorrer distintos lugares. Todo esto entra al momento de transmitir, se convierte en un todo para lograr transmitir lo más genuino.
¿Ofrece clases particulares de canto?
Sí, ofrezco clases particulares de canto. En La Plata tuve mi Academia en su momento, luego vino la pandemia, después nació mi bebé, Alondrita, con Luciano (N.d.R. se refiere a su pareja, el también músico Luciano Cañete), que requirió de mucha atención. Ahora estoy en Dolores por cuestiones de la vida. Ofrezco clases en La Plata dos veces al mes para mis alumnos de siempre que me extrañaban y yo a ellos, hago ese esfuerzo que para mí es un placer, además de que se suma gente nueva. Pero me gustaría hacer raíz acá en Dolores, que la gente me conozca un poco más y confíe en venir a mis clases. Me gustaría brindar todo lo que caminé hasta acá en este lugar. Me gustan las clases particulares pero tengo un proyecto de Academia muy interesante para todas las edades, en particular para chicos, adolescentes, sin olvidar a los mayores. Porque no hay edad para estudiar canto, la voz se va renovando y mutando a medida que uno lleva el tiempo adelante, antes y después. Así que se trata de un espacio abierto a todo público. Estoy con muchas ganas de encontrar el momento, el espacio y la manera de sembrar mi Academia en Dolores.
¿Cómo ve hoy tu carrera mirando atrás y cómo hacia adelante?
Hacia atrás lo que contaba antes, me siento orgullosa, conforme, entera. La música en todas sus formas me ha dado lugares, paisajes, públicos, colegas, afectos. Es mi vida mi carrera, literalmente. Tengo desde siempre la gracia de haber podido trabajar del arte, que en nuestro país no es mal visto pero como que falta algo más… decís que hacés arte y preguntan ¿de qué trabajás? No lo digo mal, sino que es cuestión de costumbre, de pensar que en Argentina ser músico es igual a vago, con la guitarra todo el día como dicen Los Decadentes (risas). Bueno no todos la vivimos así, tengo una familia hermosa, dos hijos y tres hijos más del corazón, de Luciano. Ha cantado en mi país y fuera de él, 4 años dando espectáculo para el crucero de la empresa Buquebús (Colonia de Sacramento Buenos Aires y viceversa), ahí pasó gente de todo el mundo y se llevó material mío. Y de acá hacia adelante estoy obsesionada con mi disco. No estamos en el mismo proceso que hace unos años, hoy todo funciona diferente. Estoy rompiéndome la cabeza y el alma hasta encontrar lo justo para darle para adelante. Así que con nuestra música a pleno y disfrutando de estas propuestas hermosas que trae el Instituto Cultural de la provincia, que me parece maravilloso que la cultura y nuestra música pueda estar en las calles de forma libre y gratuita. Estoy muy contenta de que el Instituto me tenga en cuenta.
¿Cómo siente presentarte en vivo y qué espera de la Peña de hoy en Dolores?
Siempre es emocionante, diferente, con alegría y amor. Tengo la bendición de trabajar con músicos extraordinarios, artistas de hermoso recorrido, talento, conocimiento y artística. No es una banda estable la mía sino cesionistas, pero hemos logrado una energía y grupo humano y artístico excelente. Así que espero que hoy la gente venga a disfrutar con nosotros y con los artistas locales que son espectaculares también, los ballets, los músicos. Que la gente venga, conozca y disfrute que estos espacios son para ellos.
¿Algún proyecto musical para este año que pueda contarse?
El proyecto es “Andando”. Por todo lo que es esta nota hasta acá. Aún estoy andando y seguiré andando. Me parece la mejor manera de comenzar. Es un momento difícil de nuestra cultura, difícil transitar, los espacios, los recursos. Pero hoy van a encontrar algo transparente como esto.
¿Cómo puede la gente escuchar o adquirir su música?
Estoy como “florenciabrownartista” en Instagram, como “Florencia Brown Oficial” en YouTube, y como “Florencia Brown” en Facebook, donde subo el día a día y videos más de impronta, más caseros. Tengo ganas de hacer feeds con amigos y colegas.
En YouTube hay un material muy lindo que el año pasado la gente de “Almas de mi pago”, de Argentinísima satelital, me dio la sorpresa de convocarme, una propuesta hermosa. Un momento que quedó registrado con otras bandas y grandes músicos amigos. Pueden encontrarlo completo, es casi el mismo repertorio que “Andando”, con la naturaleza alrededor. Lo buscan en YouTube, está en dos partes.